Restauración y cuidado de muñecas antiguas.
Historias de vínculos con su muñeca, narrada por sus dueñas o por las hijas...
Patrimonio nacional y global

domingo, 2 de enero de 2011

El armado

 Para comenzar a armar a Caperucita debemos cortar un trozo de elástico de aproximadamente el doble del largo del torso.
Lo unimos en la punta. Es conveniente terminar el nudo con una costura para evitar que se desarme el nudo o se corran los elásticos internos que forman el alma del cordón.
Luego anudamos para que quede como un 8, como está en la figura.




El 8 se utiliza invertido, es decir la parte pequeña hacia abajo. Enganchamos las piernas en el elástico, primero una y apretamos el gancho que lo sujeta.

 Luego enganchamos la otra puiera y también apretamos el gancho y pasamos por el cuello el otro extremo que sostenemos tensionado con la pinza de cirugía.Ese nudo asegura que cuando el elástico tensiona no lo haga sobre los bordes de los orificios donde encastran de las piernas, ya que el material es muy débil. Así, queda tirando del centro de la muñeca.

Los brazos los unimos con el elástico que traía, ya que estaba en buenas condiciones.






Verificamos que la muñeca se pare y se siente






A pasado la prueba y se para perfectamente manteniendo el equilibrio.










Solo falta colocar la cabeza.

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